Sucralosa

La sucralosa es aproximadamente 600 veces más dulce que el azúcar, lo que la hace muy eficaz a la hora de proporcionar el dulzor deseado con un uso mínimo. Es termoestable, lo que la hace perfecta para fórmulas de alimentos y bebidas, como hornear, cocinar e incluso productos que requieren una larga conservación. La sucralosa tiene un sabor limpio, similar al del azúcar, y no deja regusto, por lo que es una opción popular en una amplia gama de aplicaciones.